El Rec del Molí.
Nace en la esclusa de Colomers y desemboca en la Escala. A su paso por Verges, reforzaba el poder defensivo de la muralla y movía las muelas del molino harinero y arrocero, pero también sus aguas servían para lavar la ropa, para abrevar el ganado, para aprender de nadar los niños, para regar cultivos, para extender el cultivo del arroz (s. XVII-XVIII) e incluso para tirar basura. Desde el siglo XIII se documenta, juntamentamb su bypass, que es el riego del Lago, el papel como elemento clave del desarrollo económico del pueblo. Estirpes como los Marimon, los Albert, los Sentmenat o los Ciutadilla deben buena parte de su fortuna a la explotación de los recursos hídricos que los abastecía el Rec del Molí.
Poco después de dejar el pueblo, cuando el riego corre paralelo el camino viejo de Bellcaire, nos ofrece la posibilidad de acompañarlo unos kilómetros. Es una ocasión única para percibir la esencia del baix Ter, el terreno llano, las tierras bajas, tan bajas que casi andas al nivel del agua. Ponle una puesta de sol o, si os gustan las experiencias más fuertes, un poco de tramuntana, y quedaréis enamorados de este país para siempre.